miércoles, 10 de diciembre de 2014

Opinión sobre fenómeno Booktubers.


No puedo comenzar este articulo sin  reconocer que en parte estoy tocando un tema relativamente importante para los Booktubers porque entre otras cosas deseo llamar su atención, para futuras charlas, intercambio de opiniones, etcétera.

Es decir en estas líneas hay algo de querer hacerse conocido en base a agregar una opinión más a las muchas que ya existen. Creo que es mejor que lo aclare yo mismo. No obstante eso no significa que necesariamente tendré contemplaciones a la hora de opinar...

Los Booktubers, sobretodo en este año que ya termina, han comenzado a reseñar artículos que los describen y catalogan, muchos de aquellos artículos dan una visión general donde se resalta que los Booktubers, están inmersos en leer literatura comercial o de masas o que sus gustos casi siempre son los mismos. También se menciona la juventud de la mayoría de los que hacen reseñas de libros y que siempre están acicalados, acompañados de posters literarios o de músicos. Estas dos últimas características llevarían consigo el peligro de encandilar demasiado al lector niño o adolescente hacia los medios audiovisuales dejando de lado la importancia de la letra escrita. Tema aparte es el afirmar que trabajan de la mano con las Editoriales, lo que hace peligrar la independencia de sus opiniones. 

Esto último creo que si se da. Pero con algunos, solo el futuro nos dirá si las editoriales mantendrán con su dinero gente que les haga reseñas favorables. En todo caso, si es que ese tipo de Booktuber existe, más les vale guardar pan para Mayo porque ese estilo de vida es ingrato y así como en la tv tienes o el cine tienes que pelear por no pasar de moda y quedarte sin que comer lo mismo pasaría acá.

Yo prefiero tomar el asunto Booktuber con pinzas.

Hay etapas en la vida de muchos lectores donde no somos precisamente los seres más sociales. En mi caso, en la escuela siempre me burlaba de los populares, los chicos bien, los aplicados, etcétera. Para mí la literatura no contribuyo a hacerme un mejor estudiante, solo uno más crítico con el estilo de vida de las personas más convencionales, muchas veces de manera sardónica, hasta ahora cuestiono mucho el estilo de vida consumista, por dar un ejemplo.

Luego, cuando empiezas a peinar las primeras canas te das cuenta que actuar con el hígado y pretender destruir a como dé lugar lo popular o comercial no sirve de nada. El arte de orientación popular existe desde que el mundo es mundo. La pintura, música, escultura, y literatura creada para deleite de las masas siempre estuvo y estará presente.

Lo que pasa es que estamos en la era de lo visual y me juego una cena con filete a que los primeros en comentar libros en el YouTube eran personas de más de veinticinco años con gustos más clásicos. Quizás luego vinieron los más jóvenes, hablaron de lo que les gustaba, esto se multiplicó y al  final esos jóvenes fueron más que los que hacían una crítica dentro de los moldes clásicos.

No estoy diciendo que las críticas negativas hacia a los Booktubers sean producto de la envidia de un grupo desplazado contra su voluntad. Pero si creo que hubo un desconcierto frente a un fenómeno nuevo, (y si comenzó en ingles peor todavía). A menudo en el chip de los que buscamos no caer en la moda esta la idea de que solo los que han basado en los clásicos la mayor parte de su formación como lector tienen derecho a publicar reseñas y en este caso vídeo reseñas. Grave error pensar así.

Como el fenómeno crecía más y más hasta el punto de ser irreversible, se optó por el auto exilio hacia otra plataforma desde la cual llorar  y renegar por la tierra arrebatada. Lo que no quiere decir que todos los Booktuber sean inocentes víctimas de la envidia. Algunos son realmente irritantes, otros no aceptan un comentario negativo, para esos la única opinión que cuenta es la positiva y tienen una actitud de o estás conmigo o en mi contra.

Pero no se puede decir que todos se comportan así. Tendríamos que revisar cada canal Booktuber para poder afirmar o negar eso. Y francamente nadie en su sano juicio perdería días o meses de su vida haciendo algo tan improductivo. No quiero mentir a los lectores clásicos. El fenómeno, como repito, es irreversible. Cada vez está mejor organizado y es más poderoso. En la Feria del libro de Guadalajara 2014 figura una premiación a la mejor vídeo reseña bajo el lema Hay que innovar, por dar un ejemplo.

¿Que nos queda? Es sencillo, no le tengamos miedo a los medios audiovisuales, hagamos vídeos y comunidades de lectura de clásicos o de autores Underground sin necesidad de afirmar o querer convencer a nadie de que nuestros gustos son superiores. Y tengamos en cuenta que a los clásicos hay que llegar por interés propio y no porque Internet te lo diga. El gusto de las masas siempre estará presente y ese gusto nos da libertad a los que estamos en la acera del frente. No reneguemos  porque la mayoría  consuma lo que a la mayoría le gusta. Los gustos populares lo son por algo.

Cerrare esta opinión, basándome en la teoría de la Antítesis y la Tesis.

¿Qué hacemos cuando llamamos sonoramente basura a algo? Pues publicidad gratuita. Creemos, no sé por qué, que el camino para que la gente lea cosas menos comerciales es insultar lo  que lee, o a ellos por lo que lee. Eso solo aísla mas a los lectores, los aleja de lo que muchos quieren que lean (Personalmente me da igual lo que lea o no gente que ni conozco).


Valoro más la opinión de cinco o cuatro que han leído a Gene Wolfe por recomendación de un amigo o profesor que la opinión de quinientos que lleguen a ese autor porque a algún Booktuber le gustó. Yo quiero que los autores Under lo sigan siendo, no quiero a muchos autores en el cine, y menos si es Hollywood, quiero que no pierdan esa magia que los hace únicos. Y para mí los Booktubers contribuyen a eso, piénsenlo.